La madre de los cielos
Escucha el Mensaje en la voz de La Jardinera:
Mis queridas semillas,
Hoy es un día muy especial y en la Rose des Pyrénées lo hemos festejado con manjares, risas, y sobre todo con una Casa Secreta del Alma que Servidora ha tenido el honor de compartir con unos seres maravillosos que viven en El Salvador.
Mi querido Mauricio, mi querido Carlos, que orgullosa estoy de todos vosotros, del ejemplo que dais de reuniros todos los días a meditar con vuestro equipo de trabajo, ¡No les falta ni un día! Y por vuestra gran Fé.
Es el día dedicado a la Inmaculada Concepción, a la Madre de los Cielos, la Madre del Universo, la Madre de todos ustedes, su Madre, tu Madre, vuestra Madre, la Madre de todos, no hay solo una madre, Ella es la Madre de los Cielos, es la Madre de Dios, Ella concibió, no importa como lo hayan escrito los hombres, no nos importa, Ella fue Madre, y pura como nuestra madre antes de casarse, toda mujer antes de casarse fue virgen, antes de que un hombre la tocara toda mujer fue virgen.
Sólo pensar que llevó al Ser de Luz, sólo pensar en Ella, y hablar con Ella como hijos. La Madre de los Cielos os acaricia la cara, os está acariciando la mejilla, os acaricia para deciros: “Hablarme. Hablarme en silencio, decírmelo en flojito porque lo escucharé, podré cambiar esa pena, esa tristeza, podré cambiar todo lo que os preocupa, todas vuestras preocupaciones podre cambiarlas, os puedo escuchar, si me habláis ¡todo cambiará! Os quitaré esa tristeza, toda esa pena, todo ese peso que lleváis, decírmelo, nadie os puede oír, nadie sabe lo que lleváis dentro del alma, y os lo quito, os acaricio, sentir mi mano en vuestro rostro, en vuestra mejilla sentirla”.
Es nuestra Señora, darle el nombre que queráis. Si no creéis, pensar en vuestra madre, que es lo más lindo, lo más hermoso, os llevó por 9 meses, 9 meses llevando un peso sin quejarse, sin decir nada, pero amándoos.
Eso es la Madre de los Cielos.
¡Que linda, que hermosa! ¡Que dulzura tiene y que bonita es! Os acaricia la cara y el rostro, ella os lleva con sus brazos abiertos, os recoge con su dulzura y su corazón grande, está vibrando por vosotros, Ella ha recibido de vosotros un lindo regalo y una sonrisa, porque os ve, os está viendo y sabe que dentro sonreís y sabe que la amáis, porque os protege y os cuida.
Ella continúa acariciando vuestra cara y vuestro corazón. Siempre os invitará a abrir vuestro corazón y sacar todas las tristezas y todas las preocupaciones.
Prepararos de alegría, prepararos también para recibir esas fiestas, no porque hay que hacer fiestas sino porque hay que estar tranquilos y serenos, ya lo festejaremos el año que viene, ahora pensemos en tener salud, porque os dice que siempre os protegerá y estará a vuestro lado, siempre os dará la mano y os llevará a todos los sitios, en todos los momentos y en todas las dificultades, y también cuando tengáis que tomar decisiones difíciles, Ella estará con vosotros y os dirá: “ahora venir por aquí, ahora tenéis que hablar, ahora tenéis que estar tranquilos, ahora tener paciencia, siempre estará, cotidianamente, en vuestras actividades, día a día en todos los momentos. No tengáis miedo, por favor, el miedo es opcional, si queremos tener miedo nos damos un susto, pero no tenemos que tener miedo, porque el miedo no existe, son los hombres que dicen: “no vayáis allí, no hagáis esto, o no toquéis”, pero el miedo no existe.
Por favor no tengáis miedo, sois capaces de enfrentar todos los problemas, todos, no hay nunca ningún problema, sólo soluciones, y hay la Luz que está encendida siempre dentro de vosotros, porque tenéis ayuda porque vuestros Ángeles de la Guarda siempre están con vosotros.
En vuestra mano La Madre de los Cielos coloca una estrella, una Luz. Todo lo que toquéis con vuestra mano sanará, todo lo que toquéis se transformará porque esa Luz es una Luz Divina. Todo lo que hagáis, tener consciencia porque todo lo que toquéis, tendrá doble efecto. Por ejemplo, si tocáis vuestros hijos, si poneis la mano encima de la cabeza de alguien, ese toque tendrá doble efecto. Porque Ella ha puesto una Luz especial, sólo para vosotros, y lo agradecemos muchísimo, porque Ella nos lo hace con toda Su pureza y con toda Su sonrisa.
Seáis felices y tengáis siempre esa alegría, mucha paz y sobre todo la esperanza, ¡claro que sí! La esperanza es lo último que se pierde, y es lo que tenemos que guardar y alimentarlo para tenerlo más grande. Y con la esperanza, pidamos a la Madre de los Cielos que crezca siempre nuestra Fe, y escribir un papelito con vuestros deseos, porque la Madre del Universo os los concederá.
Con todo mi amor,
La Jardinera
