🎧 Escucha el Mensaje en la voz de La Jardinera
Mis queridas semillas,
El mensaje de hoy como siempre curioso, interesante y simpático. Comprenderéis por qué.
Una vez un señor, vivía en una grande ciudad, y dijo: “Ya me conozco la ciudad, quiero ir a vivir a otro departamento, a otra ciudad. Para conocer gente, conocer museos, conocer montañas ríos mares. Quiero cambiar, me apetece mucho” Y este señor o este hombre cogió el avión, tomó el avión y llegó a otra ciudad maravillosa, ¡maravillosa! Y al llegar dijo: “Primero antes de todo, de alquilar una casa, voy a ver que hay. Si hay almacenes cines, si hay hoteles, restaurantes, parques. Cómo son las calles de esta ciudad.”
Y un día se decidió ir por todas las calles, plazas, las grandes avenidas, otro día conoció los monumentos, y eran muy bonitos. Y dijo: “antes de comprarme la casa voy a preguntar como son la gente de aquí, de esta ciudad, me interesa quiero saberlo, voy a vivir en ella, quiero saber como son.” Y vio a una señora que salía del supermercado.
Y la señora le dijo:
El hombre se quedó helado, helado. Y dijo : “Claro, claro muchas gracias señora” y se fue. Pero antes de irse le dijo
Se despidieron. Y dijo: “no me puedo quedar así y se fue a otra avenida y a una persona que salía de correos le preguntó:
El hombre la miró, la miró con grandes ojos, sorprendido y le dijo: ¡Muchas gracias! Y la señora le dijo:
Entonces nuestro buen hombre, fue andando reflexionando mucho, y pensó: “Si son envidiosos y celosos como en mi ciudad, si son buenos y amables, como en mi ciudad para que voy a cambiar? Pues me quedo, y se fue a su ciudad.
Por eso digo nos vamos a reír, porque a veces pensamos que la gente que viene de otro país o de otra ciudad son mejores que nosotros, o que los que habitan en otro país, son también diferentes, pues el resultado ahí está. Somos seres humanos y tenemos las dos cosas. Somos los mejores! ¡grandes almas, grandes corazones, con muchísimo amor! y amamos de verdad.
Pero de tanto en tanto, sólo de tanto en tanto, pues sale el otro lado que no nos gusta, que no lo queremos ni siquiera oír hablar. A cada quien de mis semillas de comprender y a cada quien de mis estrellas de crecer. En ese corazón puro, en esa alegría y siempre dar la mano para estas fiestas. No os celebraremos Navidad como cada año, No, por favor, celebrarla como si fuera un Domingo más con algunas cositas mas para comer. Pero siempre vuestra mascarilla, las manos, y la distancia y cuando ya se termine, (que faltan pocos días ya para la vacuna) irá mucho mejor y podremos celebrar, abrazarnos, y continuar la vida como siempre ha sido. Con nuestros altos y bajos, con nuestras alegrías y con nuestras fiestas.
¡Ánimo mis semillas, no tengáis miedo, para nada, y empezar a escribir estos papelitos para la Casa Secreta que serán: pensamiento palabra y obra.
Y con estas palabras un abrazo muy fuerte de vuestra Jardinera.