December 27, 2020

Aceptar y obedecer

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🎧 Escucha el Mensaje en la voz de La Jardinera

Mis queridas semillas,

Las Navidades os dije que tenían que ser un Domingo como cada año, con la diferencia que se puede preparar la comida mejor, también hacerse regalos para más tarde poderlos dar, pero sobre todo la salud, es el mejor regalo, la salud. Ser muy prudentes, en apariencia no parece que alguien pueda tener el Covid, pero no nos damos cuenta y hacemos tanta confianza que cuando se va esa persona nos deja ese virus. Así que por favor prudencia.

Hoy compartiremos algo que es de Navidad: como cerraron las Universidades, uno de los profesores le dijo al alumno que era más elevado, que estaba preparado y él decía: “yo tengo que viajar muchísimo, y quiero aprender el arte de meditación, y quiero ser generoso” El profesor decidió enviarlo para estas fechas de fiestas y tan entrañables, como es las navidades, el día después de navidad, y lo envió a un centro hospitalario. A un centro médico. Y le dijo: “Mira vas a este hospital, que es sobre todo para personas sin recursos, son muy pobrecitos y ahí podrás empezar ya tu carrera y lo que has decidido hacer”.

Y pasó el día y entonces vino a ver a su profesor y le dijo (cuando regresó de su primer día porque le dijo tienes que quedarte al menos de quince a un mes quédate y así comprenderás muy bien.) Y cuando regresó el primer día del hospital, el profesor le preguntó: “Qué tal cómo ha ido” y el joven respondió: “¡Estupendamente! Me ha encantado, ha sido algo extraordinario y he ayudado todo lo que he podido y todos están muy agradecidos. He preparado la comida, he limpiado y aseado a los enfermos, he cambiado las vendas a niños, incluso el director del hospital me ha felicitado porque siempre había algo que hacer. Cambiar un gotero, ir de un lado ir a otro, todos estaban encantados de mi, todos, todos. Y cuando ya me felicitó el director me vine. Y vengo a decírselo.”

Entonces el profesor cogió una vela, que tenía en su casa y la encendió, encendió la vela y la puso debajo de una hoguera, es decir un montoncito de leña que tenía la chimenea. Y ya estaba preparada para encenderla, y el alumno muy extraño le preguntó: “¿Por qué hace eso profesor? ¿Por qué enciende la vela? ¿Una vela entera para encender el fuego?” El profesor le respondió:

“Recuerda siempre esta lección: como la cera se derrite en el fuego, así de rápidos pierden mérito las buenas acciones de las que uno presume”

Recuerden mis semillas que: así como se derrite la cera, en el fuego (y eso muchos lo han visto) hacer caso una vela en el fuego cuando van a visitar a la virgen de Lourdes, a la Virgen de Fátima a otras vírgenes, ponemos una velita enseguida se funden. Así de rápido se pierden los méritos de las buenas acciones de las que uno presume. Sí, mis semillas, cuántas veces hemos dicho “estoy muy contento, muy contenta, hoy he hecho un buen trabajo he ido a ayudar a mi abuelita. Le he ayudado a subir las escaleras con la compra que no podía. Hoy he ayudado a unos amigos a la mudanza, otro día he ayudado a plantar tomates, cebollas, que no sabía que había que acostarlas, las cebollas, para después una vez que se pone la tierra se riegan y cuando las raíces se agrapan o se cogen a la tierra, enseguida levantan la cabeza que pronto uno olvida esas buenas acciones.

Siempre olvidamos las buenas acciones, y nos cuesta mucho volver de nuevo. Porque una vez más la humildad es algo que no hace parte de nosotros, porque es un acto que lo tenemos guardado en maletas, en cajas, en bolsos, quizás en el granero, puede ser. Hay muchas personas a las que se les da las oportunidades para poder elevar el alma, aprender, elevarse, no quedarse un ignorante, cambiar de modales, de pensamiento. Cambiar, simplemente cambiar, y no le dan importancia, hacen como la vela: queman la vela y la cera se funde. Pero las oportunidades solamente pasan una vez en la vida, raramente se repite, raramente. Oportunidades siempre hay, pero como la primera nunca, nunca, y eso es lo que no tenemos que olvidar, mis semillas.

Este año nos toca una experiencia muy buena, pasar en casa estas fiestas prepararnos, para ser más fuertes el año que viene. No tengáis miedo, que es lo primero que os repetiré siempre, no tengáis miedo, no os pasará nada. Si es la hora, no os preocupéis están vuestros seres queridos con los brazos abiertos. Está el Maestro de Tiberiades, está la Madonnina, está la Madre de los Cielos, que os guía, que os protege y que os dará la mano. No os preocupéis. El miedo alejarlo de vuestras vidas, hacer una vida normal no escuchéis las informaciones.

Sabéis que para Navidad estas fiestas, mi sacrificio lo ofrezco siempre a Dios, a Jesús a Nuestra Señora, siempre. Y las paso muy lejos de la familia y de los amigos, me voy lejos, de preferible sola. Porque es un momento donde están las puertas de Shambhalá, las puertas del Universo, abiertas. Es el momento donde toda la humanidad celebra Navidad, Natale, Noel, celebra estas fiestas. Enciende una vela, reza, espera el Belén, el pesebre y es donde se abren y es en ese momento, donde Servidora puede trabajar mucho, mucho, en el Universo y es donde puede preparar los viajes, los cursos superiores. Y contestar a todas vuestras preguntas.

He tomado el avión, no me han preguntado nada, ni siquiera este papel del Covid, y lo tenía, lo tenía preparado, pero ni siquiera lo han pedido. No me pidieron nada. Ni había policías, ni había nada de nada. Simplemente querer, y no ha habido ningún problema así que estoy muy contenta porque espero que el año que viene poder ir a todos sus países: Bolivia si Dios quiere ahí me tendréis, para mí sois soles todos, a Costa Rica, a Panamá, a Brasil, a todos. A Italia, El Salvador, Honduras, a Guatemala, a todos los países, no quisiera olvidar ninguno. Pero no tengáis miedo, se puede volar, y las informaciones escuchar lo justo porque meten tanto miedo que finalmente han hecho más daño a la humanidad con las falsas informaciones metiendo este miedo psicológico, que lo que es la pandemia en sí.

Saturno y Júpiter han hecho una limpieza, duele mucho decir que las personas amadas con el Covid, se fueron para siempre. ¿Pero qué iban a hacer aquí? enfermas, o en casas de jubilados, aunque sean nuestras madres y vuestros padres, pero seáis sinceros con vosotros mismos. Esas personas que tenían enfermedades como senilidad o simplemente el Alzheimer o que no podíais cuidarlas, no tengáis culpa, no tengáis remordimientos porque seríais falsos e hipócritas, si estaban en casas de jubilados es porque no podíais cuidarlos. Tener la conciencia tranquila y estar en paz con vosotros mismos ¡era porque ya estaba escrito, en su camino! El Maestro de Tiberiades los llevó, los acompañó, el Ángel de la Guarda los llevó a esos lugares. O simplemente en casa cogieron esta pandemia porque era la hora, era la hora y ya no verán otras cosas más malas, más feas, aunque os parezca horrible o crudo, hoy el humano es la verdad y la verdad hay que hablarla siempre. Duela lo que duela, cueste, lo que cueste, pero nunca tendremos sorpresas.

Claro que se fueron mucha gente noble, pobres, pero decidme, todas estas personas que están en las calles, estas personas que dormían en las calles que no tenían, que era siempre un calvario, ¿no es mejor que estén ahora en la Luz? ¿Con el Padre? con Dios? claro que sí, ¡claro que sí! Todos tenemos miedo de la muerte, claro que sí, pero al menos los que se han ido, ahora están felices y en Paz, con ellos mismos. Y están en la luz Divina, del lugar donde venimos. En la Luz Divina.

Así que no tengáis ni miedo, ni culpa, pasará lo que tenga que pasar, por eso aceptar es la serenidad. Y obedecer, es dejar que Dios guíe siempre nuestras almas.

Y nuestra alma sabe sólo una dirección: el camino recto, el camino de la Luz, ese camino de la Luz nos llevará directamente al Padre, nos lo ha dicho su hijo, nos lo ha dicho.

No perdáis la esperanza, alimentarla con la Fe, y esa Fe hará crecer la esperanza y la esperanza, nuestra ilusión que dentro de unos años volveremos de nuevo a abrazarnos, querernos (nos queremos igual) pero nos querremos más, festejaremos muchas Navidades tendremos tiempo de hacernos regalos, mimos.

La economía también era necesario, os dije antes de que llegara la pandemia los ricos serían más ricos y los pobres más pobres siempre es la misma ley. Siempre es la misma ley, pues los ricos ya tenéis Amazon, Facebook, todas estas grandes empresas se han hecho millonarias porque claro comprar ahora solo es online. Y los pobres todos aquellos, que eran ricos hoteleros, restaurantes, tiendas, las tienen que cerrar.

Algo tenemos que aprender, por eso nos lo han dado, esta lección es para la humanidad. Desde que el planeta es planeta, desde que el mundo es mundo, nos lo han dado, El diluvio Universal, la tierra helada, cuando se heló la tierra. Cuando murieron todos los Dinosaurios, siempre nos han dado lecciones, la peste negra, la peste bubónica, siempre han habido pandemias. Las guerras, las guerras siempre se han eliminado, ahora hay 80 millones, que se han ido a la Luz. ¿Pero cuantos, cuantos murieron cuando estuvo la segunda guerra mundial? Y los del pueblo de Israel que lo llevarán marcado toda la vida, y las guerras de Alejandro Magno, de todos los imperios, si piensan que los imperios otomanos y los imperios turcos y los imperios moros y los imperios de los reyes católicos, ¿por qué siempre se llama Imperio?

Porque tuvieron que haber guerras y matar millones, millones y millones. Por eso se hacen imperios, pero ya no nos acordamos, ya lo olvidamos. Los reyes católicos fueron ellos los que dieron la orden de la “Santa Inquisición”, y todos los que mataron sin tener culpa. Porque allí todos los que molestaban y sobraban los quemaron, los destrozaron, pero claro, era la “Santa inquisición”. No mis semillas no podemos quejarnos, dar gracias a Dios porque esta pandemia hace una limpieza a los más pobres de la calle, a los enfermos de las casas de jubilados, a los que los hijos eran un peso porque no queremos reconocerlos son nuestros padres y decimos bueno al menos allí están cuidados.

Servidora también, mi madre también estuvo en una casa de jubilados, sí, porque no podíamos cuidarla. Somos cuatro hermanos, pero los cuatro trabajamos y era imposible poderla cuidar. Y nos pusimos de acuerdo los cuatro, nuestra conciencia no estaba tranquila, porque madre como esa no había, era la más grande, la mejor, claro, para nosotros, para nosotros. ¿Pero qué paso? tuvo una neumonía, ¿por qué? Porque en esas casas, (están cuidados) pero siempre llegan el momento donde el personal no puede vigilar a todos, y cogió frío. Era diabética así que la persona con riesgo, lo digo por ahora, porque las personas que tienen riesgo son las personas que tienen insuficiencia renal, diabética, problemas cardiacos, problemas de circulación de sangre, problemas pulmonares, siempre hay algo que tenemos, nuestro cuerpo es perfecto, pero es como los coches, siempre tienen una pieza que se gasta más que otra por eso el mejor regalo: la mascarilla, lavarse las manos y la distancia. No solamente para nosotros, pero es que podemos proteger a los otros también.

Si no, terminaremos con la humanidad, porque tendremos aún unos años delante que tendremos la mascarilla, que tendremos que tener cuidado, porque van a salir otros virus de este. No han encontrado aún la vacuna, cuidado mis semillas. Voy a aclarar dos cosas, la primera: siempre en esta Enseñanza está la libertad, el libre albedrío, cada quien puede hacer lo que sea y lo que mejor le convenga, en español se dice hacer lo que os da la gana, así es, hacer lo que os da la gana, lo que mejor os conviene lo que mejor os va. Las primeras, vacunas, dijeron los científicos que había efectos secundarios, pero siempre en un inicio tienen que haber cobayas, y cuando descubren algo tienen que probarlo. Así que cada quien tiene que tomar su propia decisión, pero no tengan miedo porque todos terminaremos por vacunarnos, nos guste o no nos guste.

Terminaremos por tenerla porque aquellos que no estén vacunados, seguro que cogerán otros virus porque así es la humanidad. Miren los niños que hay padres que no han querido, contra la varicela, contra la tosferina, contra las enfermedades de los niños ha sido peor porque lo han cogido de grande y han sido mucho más grave. No, todos tenemos que pasar por el mismo rango, es un rango sin estrellas sin galones, en nuestra salud, nuestra salud. Aquí no hay títulos es simplemente nuestra salud.

Imagínense que los abuelos, benditos sean ellos, tienen la vacuna, estarán mejor protegidos, pero sus nietos no la tienen, y si uno de los nietos no la tienen y coge este virus, o el segundo o el tercero o el cuarto virus, puede transmitirlo a este abuelo o abuelita. Por eso todos tendremos que llevar la vacuna, os guste o no os guste. Pero que quede claro, Servidora nunca os obligará a hacerlo o no hacerlo. Hubo una confusión una enfermera, no española, no española, una enfermera, tuvo malentendido y pensó que Servidora dijo que había que ponerse la vacuna o que no se tienen que vacunar. No, no no, Servidora jamás va imponer una ley que ustedes no quieran, jamás, así que a esa enfermera que quede claro se puede vacunar o no se puede vacunar que haga lo que ella quiera. Lo que decida es para ella, nada más, como para todo el mundo, podemos hacer como mejor nos vaya. Es una prevención, nada más.

Este virus mutara varios, las personas más sensibles son las que he citado, puede ser también una persona que esté muy sana, también a los jóvenes, pero ellos son imprudentes, porque como se puede atar a un joven y decir no te muevas si tiene mi sangre viva y lo que desea es salir, divertirse, es imposible confinarlos, así que también estarán contaminados, pero gracias a Dios está la vacuna, libre a ellos está de tomarla, de hacer lo que quieran. Que quede bien claro, Servidora nunca ha dicho de no vacunarnos o de vacunarnos, jamás, cada quien tomará su decisión, cada quien y cada quien tiene que ser libre de hacerlo. Cada quien, eso es muy importante. Y los padres para los menores y si los menores quieren, pues los padres obedecerán. Así que por favor tranquilidad, tranquilidad porque si estáis tranquilos es que habéis aceptado este periodo que tenemos que pasar qué es una enseñanza para darnos cuenta los valores que tenemos, la educación que hay en todo el planeta. podemos apreciar.

Saliendo del avión, tomé el autobús y había dos jóvenes sentados, se levantaron corriendo y nos dejaron el asiento. Los miré y les di las gracias porque hoy en día ya no se estila. Estos detalles tan importantes, de saber vivir, de educación, te pasan por delante, se sirven los primeros, hasta personas también con 54 años pasan la mano delante de otras personas para coger objetos, o servirse o están sentados y no se mueven. Esos dos jóvenes, me encantó, porque no se les había pedido. Hoy en día ya no se pide, pero esa educación es un valor muy grande, ojalá durante esta pandemia los jóvenes aprendan el sacrificio de los padres que les han dado todo o les hemos dado todo.

Hay una madre que ha amado mucho a sus hijos y los ama, claro, los amará toda la vida. Se fueron a un país muy lejano, hicieron el mismo trayecto. Los dos tuvieron la mujer de su vida, los dos, la mujer de su vida. Y los dos no tuvieron hijos, pero sus mujeres que eran las más maravillosas, las mujeres perfectas, perfectas en todos los sentidos: Inteligentes, instruidas, una buena profesión. Increíble de mujeres, tenían dos hijos. Dos hijos y cada una de las mujeres tenía un hijo enfermo. Qué casualidad que cada uno era niño y tenía la misma enfermedad. Pero esos dos hijos nunca se acordaron de su madre ni de su padre, nunca fueron durante 7 años a verlos, a preguntar. Solo de tanto en tanto llamaban por teléfono, quizás para navidad, para el aniversario, pero nada más porque ya tenían sus familias. Cada uno tenía su familia con dos hijos; un niño y una niña. Y el niño enfermo a vida, a vida, pero ellos no tenían hijos.

Uno de los dos hermanos, su ilusión es ser padre, le gustan mucho los niños, y quería ser padre, era su ilusión ser padre, porque es muy cariñoso y le gusta enseñar. Cuando era pequeño, quería ser conductor de autobuses o tener un cine porque le gustaban los niños. Al otro no, al otro no le gustan los hijos. Pudo tener dos hijos, pero hizo abortar a las dos novias que tuvo, les hizo abortar porque no estaba preparado y no quería hijos. ¡Y ahora tiene una chica! ¡Ah! ¡Es una maravilla, una maravilla! Pero los hijos son de otro hombre y tiene una enfermedad que no se curará nunca, el otro también. Ah, pero el otro ya lo han reemplazado, ya está reemplazado y vive con la ilusión de que volverá esa mujer perfecta, pero una vez que se rompe y que el amor se pierde ya nunca más vuelve de la misma persona, jamás, jamás. Pero vive en su mundo, vive en su mundo, pues así es esta pandemia. Júpiter y Saturno han venido para deshacer y para buscar nuevos proyectos, nuevas direcciones, nueva vida. Nuevas mujeres. Y aceptar, aceptar y obedecer, al Universo, claro está, al Universo.

Son palabras de Buddha la persona que no acepta siempre irá a la deriva y siempre pasará lo mismo, se equivocará tarde o temprano.

Podéis mirar el ejemplo de estos dos hermanos; El primero se fue de casa por amor, el segundo se fue de casa por amor. La mujer perfecta del primero, le puso sus cosas delante de la casa y le dijo: "ya tengo alguien más, es el momento de que busques tu vida, porque la mía ya la tengo." Y el segundo le ha dicho: Continuaremos amigos, trabajarás para mí, pero en mi vida ya hay alguien más en mi corazón. Ahora ya tienes que irte de la casa, ya te he reemplazado.

Así es el amor, cada día llama a una puerta diferente, y cada vez se encuentra. Igual que el trabajo, no os preocupéis. Muchos habéis creído que hemos perdido el trabajo y es cierto: los hoteleros, los restaurantes, las tiendas, todos los balnearios, todos los lugares públicos. Pero no os preocupéis porque somos humanos, y vamos a volver de nuevo, como antes. A comprar, a ir a los lugares públicos, así que de nuevo tendremos esos empleos, de nuevo, pero van a salir muchas empresas nuevas, muchas ideas nuevas, entramos en la era de acuario, así que hay muchos genios, jóvenes genios, hay muchas novedades y os invito a que penséis a realizar, por muy raro que sea, funcionará.

Pero despertar, despertar de vuestras películas, despertar, porque la realidad es otra, la realidad es otra.

Y muchos creéis en vuestras ilusiones, pero la vida no es una ilusión, la vida es dura y cruel.

Esos dos hermanos nunca se han hecho la pregunta, ¿Tiene corazón mi madre? ¿Sufrirá mi madre? ¿Estará destrozado el corazón de mi madre? ¿Y mi padre? Ha trabajado toda la vida para alimentarnos, pagarnos las escuelas, hasta los 19 años o 20 años que vamos a cumplir, y ha hecho todo para nosotros y ahora nosotros, ¿Qué hacemos por él? Por eso os digo que no tengáis remordimientos, porque ustedes ponen a sus personas mayores en casa de jubilados o centros donde están las personas mayores, pero estos dos hermanos han abandonado a su padre y su madre, que son jóvenes pero los han abandonado. Y no se ocupan ni preguntan si han comido, si no han comido, si tienen jerséis, si tienen frío, si tienen calor, como han pasado las fiestas, nada. Ellos lo han pasado juntos porque como esas señoras tan extraordinarias les dijeron que el amor se había roto, pues han pasado estas fiestas, navidad en la habitación de un hotel y el primero de año en la habitación de un hotel la pasarán, pero jamás han pensado vamos a ir a ver a nuestra familia. Ah y a propósito todos los hijos dicen que ya no tienen familia, porque la nueva familia es la suya. ¡Qué bonito! ¡Qué sueño! Ojalá no despierten nunca, pero la vida da palos. La vida da palos, y esos palos que da la vida, son los que nunca se olvidan.

Los que hemos pasado por ahí que son de una de cal una de arena lo sabemos. Y yo agradezco cada día, cada día, la marca de la mano de mi madre en el culín, cada día y ¡ya no digo la chancla voladora! Como iba y venía, tenía razón, y tenía razón. Por eso, hoy soy agradecida, muy agradecida, muy agradecida.

No tengáis miedo a mis semillas, disfrutar de estos días, como un domingo más, que hay muchas Navidades y nuevos años que llegan ¿o se va a terminar la vida este año? ¡No! Pues entonces alegraros, alegraros.

Es largo este mensaje, os lo voy a mandar en varias veces, pero vale la pena, porque va todo el corazón y todo el amor de vuestra Jardinera.

¡Y cada quien que saque una lección, y cada quien que se alegre! ¡Y cada quien que aproveche a tener ese cambio de consciencia! Y que abra el corazón bien abierto para que el alma pueda evolucionar.

Solo hay un camino y el camino recto que es de Luz. Y es el Maestro de Tiberiades. No confundamos, no hay otro maestro, hay muchos iniciados para servidora solo hay este Maestro el de Tiberiades el Maestro que nos habla con la verdad. Que nos enseña el camino de Luz y su Santa Madre nos pone su manto de estrellas para que siempre estéis protegidos para que todos podamos cantar, soñar, ¡bailar y celebrar!

Con todo mi amor vuestra Jardinera.

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