January 11, 2022

Confianza y Esperanza en el Futuro

article preview

🎧Escucha el Mensaje en la voz de La Jardinera

Mis queridas semillas,

¡Soy muy feliz de compartir este momento con vosotros, con ustedes!

Una vez, había un león muuy anciano, muy viejito. En la selva, cuando ya son así, muy muy muy viejitos, tienen los colmillos que se le han caído, los dientes desgastados y no pueden cazar.

Este león se dio cuenta de que ya no podía cazar y no tenía fuerzas. Entonces pensó: ¿Qué voy a hacer? ¡Aaaah! Voy a encontrar una solución, es la astucia. Hay que ser astutos en la vida, entonces fue cerca de una cueva y entró y se estiró en el suelo y ahí tendido gemía. ¡Ayyyyy, ayyy! ¡Qué dolor! ¡Qué malito estoy, estoy muy enfermito! Ya no puedo salir.

Los animales salvajes al oírlo se iban acercando, alguno que otro se acercaba cada vez más, cada vez más y le preguntaba: ¿Qué tienes? ¿Qué te duele? Y ahí se acababa la historia. ese animal ya no salía más. Y él podía comer tranquilamente sin ir a cazar.

Así pasaron los meses y los años y el león siempre tenía a alguien que caía en esa trampa. Entraban apenas en la cueva y les daba lástima y al acercarse, él aprovechaba para cazar su presa.

Pero un día, una zorra, un zorro, se acercó y ya conocéis muy bien. Un zorro es muy astuto, mucho. Es uno de los animales más astutos que hay en nuestro planeta. Y se acercó y observó. Al verla, el león le dijo:

¡Hola señora zorra! ¿Cómo está? Y ella contestó: Bieeen, muy bien ¿y usted? Y él le dijo: Pues ya ve, muy mal. No me puedo mover y no tengo nada para comer. Estoy muy malito. La zorra le contestó: ¡Huy, cuánto lo siento! Pero, ¿No puede de verdad levantarse un poco? Porque podría acercarse a los alrededores. Nooo, no puedo, estoy muy malito. E insistió el león. Vengaaa, hágame compañía, siéntese a mi lado, hágame compañía un poquito. Hablaremos, pasaré el tiempo, y no me sentiré solo.

Y la zorra lo mira y le dice: Señor león, entraría de buen gusto, pero, mire usted en el suelo, hay muchas huellas que han entrado. Es lo primero que he visto. Y ninguna ha salido.

El león se calló, no dijo nada más y la zorra se dió media vuelta y se fue. Feliz, contenta porque no cayó en la trampa y pudo vivir.

¿Qué nos enseña esta pequeña leyenda?

Que si de joven no sabes ahorrar, economizar y guardar para cuando seas más mayor, cuando llegue ese momento, no tendrás nada y estarás en la calle y tendrás que mendigar.

Jóvenes. estudiar, si no os gusta estudiar, elegir el trabajo que mejor os gusta. Lo importante es poder tener un salario y economizar. Eso no quiere decir privaros de todo pero sí, ahorrar y mañana estaréis contentos porque tendréis unos buenos ahorros y disfrutareis sin tener ni que pedir no haceros los enfermitos ni tampoco ser falsos e hipócritas. No tendréis que decir que estáis solos, que queréis suicidaros porque encerrados no estáis bien, porque os falta un caprichito. No.

Si ahorráis, comprenderéis que en el momento que más lo necesitéis, podréis defenderos en la vida.

Igual los adultos, no hay que esperar que cuando seáis mayores vengan vuestros familiares a cuidaros. O vuestras ex esposas o maridos o extranjeros. Es algo muy sencillo que no pensamos,

Servidora siempre ha dicho la palabra del maestro de Tiberiades:

Los pájaros no llevan monedero y comen. Los animales no llevan monedas y comen. Hoy me doy cuenta, efectivamente, el pájaro no lleva su chequera, su carta de crédito ni sus monedas. Pero prevé en su nido y guarda una buena provisión de frutos secos, de animalitos para el invierno, aquí en Europa. Y en vuestros países también.

Igual como nosotros, los otros animales, por ejemplo, el león y la leona, cuando van a la caza, les dura unos 4 días lo que ha cazado y los restos los dan a los chales y hay muchos animales que se alimentan de esa pieza de caza. Pero nosotros vamos al supermercado.

Porque nuestro instinto es animal pero nuestros actos son humanos. Y si no llevas tu carta de crédito no te dan nada. Por mucho que lo necesites, no te darán nada. Así que ya sabéis, 50 para vivir, 50 para ahorrar y mañana podréis viajar y tenerlos.

Hoy os reiréis de mis palabras, mañana seréis felices.

Con todo mi amor,

Vuestra Jardinera.

Escribe tus comentarios