January 29, 2022

El diálogo es lo importante

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🎧 Escucha el Mensaje en la voz de La Jardinera

Mis queridas semillas,

Estuve en una reunión de padres en la escuela, y era una reunión muy importante porque habían reunido a todos los padres y había muchísimos. Los profesores y profesoras comentaron cómo se pasaba en casa, como veían a sus hijos, que comportamiento tienen y los padres se miraban los unos a los otros y dijeron:

“Bueno no tenemos mucho tiempo que dedicarles a nuestros hijos porque trabajamos, igual la madre que el padre y nos vemos muy poco.”

O a veces había una madre que decía:

“He preferido quedarme en casa para criar a mis hijos y he dejado el trabajo, pero al fin del mes es muy justo y no llegamos”.

Había padres que decían: “O me voy muy temprano y no los veo, no puedo desayunar con ellos o bien llego por la noche muy tarde y no puedo cenar con mis hijos:

Y todos los profesores y maestros dijeron: “este es un problema, pero de todo el planeta, porque todos los niños desean la comunicación y no pueden.” Es la razón que se dan más al móvil, o internet, u otros juegos.

Es tan importante la comunicación, pero también hay que comprender que los padres si no trabajan, no pueden darles una vida como ellos desean. Así que había un problema muy grande, y los dos tenían razón, tanto los hijos como los padres y los profesores hicieron hincapié en que tenían que dialogar mucho con los hijos.

Entre ellos había un padre y dijo:

Yo no puedo verlos, a mis hijos. Y tengo un hijo muy sensible y siempre me está esperando por la mañana para desayunar, pero tengo que irme a las 6 de la mañana. Cuando llegó ya está en la cama, ha hecho sus deberes, cenado y ya está en la cama.

Entonces he encontrado una manera de comunicarme con él. Cada noche, cada noche, antes de irme a la cama, por muy tarde que sea, entro en su habitación. Apenas lo veo con el reflejo de una pequeña luz que entra por la ventana y lo contemplo y he comprendido que está esperando. Le doy el beso de buenas noches ¡pero está tan profundamente dormido! Que no me oye ni lo percibe, pero ¿sabéis que hago? Cojo la sabana y en un rincón de la sabana, en una esquina hago un nudo, me voy silenciosamente y cierro la puerta”

Al día siguiente mira su madre y le sonríe y le dice:

“¡Papá vino ayer y me dio un beso!” “¿Ah si, hijo? ¿Hablaste con él?” “Sí, me dejo un nudo en la sabana.”

Y así continuó, años y años.

Cuando fue a la escuela la profesora habló de nuevo con los padres y dijo:

“Ha habido un cambio, pero hay uno de los niños que trabaja muy bien, el más estudioso de toda la escuela.”

Y cada padre iba diciendo: “he tomado un poco más de tiempo, he salido una hora antes, lo he llevado a hacer bicicleta, hemos ido al cine, hemos ido a merendar, he estado con él”

Y de todos los niños de la clase solo uno estudiaba bien, era bien educado, terminaba bien, solo elogios. Ese niño era el que su padre le hacía un nudo en la sabana, porque sabía que la comunicación era ese nudo en la sabana, sabía que cada noche, cada noche, cada noche, ni un solo día falto, donde le daba un beso y hacia el nudo. Así sabía el hijo que su padre pasaba, que no lo olvidaba y que siempre estaba presente en el corazón de ese padre.

Me ha gustado mucho ese detalle. ¿Por qué no lo hacemos nosotros? ¿Por qué no lo hacéis cuando no tenéis tiempo de ver a vuestros hijos?

Dejar un detalle, escribir una nota:

“He pasado a daros un beso”

“He pasado a decirte cómo habías pasado el día”

“Vengo de darte un beso y te he visto tan hermoso o tan hermosa que mañana podamos vernos.”

“Sé que has tenido un día bueno o un día complicado” y dejarle un papelito “pero siempre estoy a tu lado.”

Que sea la madre o el padre, podéis hacerlo, ¡aunque sean mayores! pero veréis que lo agradecerán. Y el resultado os lo dirá la profesora:el mejor alumno era el niño que cada noche su padre le hacía el nudo en la sabana.

Mis semillas, he repetido tantas veces que la actitud es lo que cuenta en la vida y si nuestra actitud por pequeña que sea hace feliz, tengámoslo en conciencia, en memoria y en nuestros actos.

Con todo mi amor,

Vuestra Jardinera

Muchos niños están esperando una caricia de su madre o de su padre, sin saber que ellos se están sacrificando para darles lo mejor, que ingratos somos cuando somos pequeños, que ingratos porque ya nos lo dan sin pedirlo, nos dan la vida, su ternura, su dulzura y su amor. Tenerlo en cuenta: niños y niñas, jóvenes, tenerlo en cuenta. Por muy severos que sean siempre han estado allí.

Nos quedaremos siempre con lo bonito, lo dulce de la historia y olvidaremos lo que no nos ha gustado, para que se pierda en los tiempos.

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