February 23, 2022

Avanzar ligeros

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🎧 Escucha el Mensaje en la voz de La Jardinera

En un lugar precioso, mis queridas semillas, en un lugar de la montaña, muy bonito, había un sendero donde a toda la gente le gustaba ir a pasear. Los niños llevaban sus bicicletas, los mayores iban andando y las parejas se daban la mano sonriendo haciéndose unas miradas cómplices y tan bonitas.

Y los jóvenes pues iban en grupo, unos cantaban los otros se contaban historias, algunas series. En medio de tanta gente había un señor que iba andando y de pronto se encontró una piedra. Mejor dicho estaba delante de su camino una piedra y el hombre cogió la piedra y se la puso en la espalda (era grande) y continuó a andar. La gente lo miró y dijo “que curioso ¿qué hará con la piedra?”

A medida que iban andando, este señor se encontró otra piedra y la cogió y la cargó, e iban andando iban encontrando piedras, las iba cogiendo e iba cargando piedras, piedras, piedras, piedras y dice pero cuando llegue al final del paseo no podrá andar este señor, ¿por qué lo hará?

Y así iban hablando y mirándolo, pero de pronto había un maestro que llevaba un grupo de jóvenes, y los jóvenes le dijeron: “maestro, ¿qué hace este hombre?¿Por qué lleva cargado tantas piedras? ¿qué querrá hacer con ellas?

Otro dijo “¿tiene pensado construir?” Y otros dijeron: “es que es un necio.” Varios jóvenes también dieron su opinión. “Debe de ser porque es inocente, no sabe lo que hace.” “¿Pero qué será?“

Y todos estaban muy inquietos porque querían saber exactamente que iba a hacer, así que iban continuando y siguiéndolo. Hasta que llegaron al lugar. Cuando llegaron al lugar, era en la cima de una montaña muy bonita, muy bonita. El hombre descargó todo y se sentó y el profesor les dijo: “Tirar una lección, habéis visto a este hombre cómo ha cargado todas las piedras, pues es igual que vosotros, cuando váis andando en la vida que cargáis el sufrimiento, que cargáis las penas, que cargáis el dolor, que cargáis la envidia, los celos ¿que dirán? ¿qué van a decir? si soy de una familia de prestigio. ¿Cómo es posible? ¿Qué van a pensar? ya no podré comprar aquellos zapatos de cuero que me costaron tan caros, ni tampoco podré llevar marcas. No, no, no, no se que van a decir.

Todos esos pensamientos son las piedras que llevaba este hombre, las ideas, los fracasos, los miedos, igualmente lo lleváis vosotros, es esa famosa mochila que es invisible y cada día la vas llenando más, más y más cada vez más.

Si pensarías solamente por un instante de dejar todas vuestras preocupaciones, olvidaros de la vejez, olvidaros de los dolores, olvidaros de esos problemas, que sean de hijos, de sobrinos, de primos, de cuñados, de padres.

Olvidaros, vivir vuestra vida, solo vuestra vida y no llevéis la mochila, no os servirá para nada. Os sentiréis ligeros si os quitáis una vez más lo que siempre se repite.

¿Para qué? ¿Para qué? Enfados si os quitáis esa mochila, veréis lo felices que sois. Y no tendréis nunca, nunca ningún peso que llevar ni arrastrar.

Ojalá todos los que han visto a ese hombre que cargaba su propio peso, vosotros no tengáis que hacerlo.

Y aquellos que tienen la enseñanza son los más ligeros y los más libres, con su chakra 6 pueden ayudar a todo el planeta, pero empezando por ellos.

Eso es la verdad, la auténtica verdad.

Mis semillas recordar ese hombre, que cada vez que iba andando, por muy bonito que era el sendero, por muy hermoso que era el paisaje, su preocupación era cargar su mochila, piedra tras piedra.

Tomar simplemente la vida con sus alegrías, tomar simplemente lo que os parece correcto, sonreír, ayudar, transmitir esta enseñanza y no tener miedo. A nadie y a nada.

Disfrutar y abrazar siempre que podáis.

Con todo mi amor la Jardinera.

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