June 12, 2023

El Valor del Perdón

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🎧 Escucha el Mensaje en la voz de La Jardinera

Mis queridas semillas,

En un país muy lejano, ¡había un reino poderoso! y el rey era bueno con sus súbditos y con sus hijos. Tenía 3 hijos, y él poseía muchos tesoros, pero había una piedra preciosa que solamente él la tenía, no había otro lugar del mundo que estuviera esa piedra.

“De sus tres hijos”, le dijeron sus consejeros, “monsieur, su alteza, ¿quien heredará su piedra preciosa, su tesoro?”

“No lo sé, no estoy seguro, mis tres hijos son buenos, trabajadores, buenos gobernantes y están siempre cerca de mi, no se que voy a hacer, ni quien lo heredará.”

Y en ese momento el rey dijo: “me viene una idea”, los llamó a sus tres hijos y les dijo, “mirar, tenéis que hacer algo extraordinario, aquel que haga una hazaña, la más extraordinaria, en este día será el heredero y heredará la piedra preciosa.”

Los tres se fueron, cada uno a lo suyo, y cuando llegó la tarde, ya oscureciendo, llegaron sus tres hijos, los recibió el rey y le dijo: “explicarme, decirme que habeis hecho.”

El mayor le dijo: “padre he ido y he matado el dragón que amenazaba siempre a nuestra ciudad y lo he vencido.” Se inclinó el hijo mayor, dio dos pasos hacia atrás y con una gran sonrisa estaba esperando si había comentarios de su padre.

El segundo le dijo: “padre, con mi espada he matado a 10 hombres muy malos que amenazaban a la población, los he matado a todos, ahora podemos estar tranquilos. Lo saludo, se inclinó, se retiró dos pasos y esperó una respuesta del padre.

Y le tocó al pequeño, al último, “y tú ¿qué has hecho hoy?”

“Padre, simplemente me he ido a la montaña, y en el acantilado estaba durmiendo mi peor enemigo, el que me hizo tanto sufrir, el que me causo tantos problemas, estaba durmiendo en el acantilado, lo vi, me acerqué, pase y me fui de nuevo, así que no he hecho nada padre, aquí estoy.”

El padre los miro a los tres y les dijo, “hijos míos los amo a los tres igual, y mi amor es infinito pero el heredero y la piedra se la llevará el último, el pequeño, claro el mayor y el segundo no comprendían.”

Pero el padre les dijo: “hay más valor en un hombre que perdona que en los otros que han matado, el perdón es tener humildad, perdonar es saber enriquecerse ¡y ser muy valiente!” Y le dijo, “hijo, aquí tienes la piedra y serás tú el futuro rey.”

Así terminó esta historia, que nos quiere decir que parecía inocente el gesto, hubiera sido más fácil empujarle en el precipicio ¡y ya no tenía enemigos! Pero hizo lo contrario, lo perdonó y ganó.

Haber si nosotros somos capaces de perdonar en la cocina, en la casa, en el servicio, ¡en todos los sitios! Y problemas que tengamos, porque siempre nos pondrán barreras en el camino, piedras para tropezar y sobre todo buscarán nuestros puntos débiles. A saber si nosotros sabemos reaccionar con el perdón y el honor o con el orgullo y la maldad, a buen entendedor.

Con todo mi amor,

La Jardinera.

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